La tomosíntesis o mamografía en 3D, es una técnica avanzada de imagen mamaria que combina una mamografía convencional con una reconstrucción volumétrica de la mama, similar a un escáner.
 
A diferencia de la mamografía en 2D, toma múltiples imágenes en cortes finos de 1 mm, eliminando la superposición de tejidos y mejorando la visualización de lesiones, especialmente en mujeres con tejido mamario denso, detectando lesiones pequeñas que podrían pasar desapercibidas en la mamografía convencional.
 
Estos cortes se reconstruyen en una imagen 3D detallada, gracias a un mamógrafo cuyo cabezal gira alrededor de la mama, capturando imágenes desde varios ángulos para proporcionar una visión más precisa.

• Calcificaciones:
  Se tratan de pequeños depósitos de minerales que aparecen como pequeñas manchas blancas en las radiografías. Las muy pequeñas se llaman microcalcificaciones y pueden aparecer aisladas o en grupo. Significa que hay cambios en la mama que requieren una vigilancia. Las calcificaciones pueden corresponder a tumores benignos y, menos a menudo, a tumores malignos.

 

• Masas:
  Pueden corresponderse con lesiones benignas como es el caso de un quiste, o malignas. Pueden contener calcificaciones o no.

 

• Quistes:
  Es una colección de líquido en el seno de un pequeño saco dentro de la mama. La exploración diagnóstica se debe completar con una ecografía mamaria. Puede ser necesario evacuar el líquido para ser analizado histológicamente. Es raro que un quiste sea maligno.

• Mayor sensibilidad y especificidad: La tomosíntesis detecta hasta un 43% más de cánceres en estadios tempranos que la mamografía tradicional. Además, permite a los radiólogos diferenciar con mayor facilidad entre lesiones benignas y malignas.

 

• Menor incomodidad: Debido a que la compresión de la mama es menos intensa y dura menos tiempo, el procedimiento es generalmente más cómodo para la paciente.

 

• Mejor calidad de imagen: La reconstrucción tridimensional y la capacidad de ajustar el contraste y la luminosidad permiten detectar incluso las más mínimas variaciones en el tejido mamario, lo que mejora la precisión del diagnóstico.

 

• Reducción de biopsias y pruebas adicionales: Gracias a la mayor precisión de la tomosíntesis, se reduce la necesidad de biopsias diagnósticas y estudios adicionales, lo que disminuye la ansiedad y las molestias para la paciente.

 

• Mejor visualización en mamas densas: Esta técnica es especialmente útil en mujeres con tejido mamario denso, como aquellas entre 40 y 50 años o las que están cerca de la menopausia, donde las mamografías tradicionales son menos eficaces.

El procedimiento de la tomosíntesis es sencillo y muy similar al de una mamografía convencional:
 

• Preparación: La paciente deberá quitarse la ropa de la cintura para arriba y usar una bata. Se recomienda no usar desodorante, lociones o talco en las axilas o pechos, ya que estos productos pueden interferir con las imágenes

 

• Posicionamiento: La mama se coloca sobre una plataforma especial, y se aplica una leve compresión para inmovilizar el tejido y obtener imágenes claras. La compresión es breve y menos intensa que en una mamografía tradicional.

 

• Captura de imágenes: El cabezal del mamógrafo gira alrededor de la mama, tomando múltiples imágenes desde diferentes ángulos. Este proceso dura unos 10-15 minutos en total

 

• Finalización: Una vez obtenidas las imágenes, la paciente puede vestirse y retomar sus actividades normales. Los resultados serán revisados por un radiólogo especializado, quien enviará el informe a su médico tratante.